Con el objetivo de mejorar la ruta de atención a la niñez y adolescencia migrante, defensores y comisarios de familia, así como cooperación internacional y organizaciones de base se dieron cita en Maicao, La Guajira, para analizar los desafíos y plantear propuestas que permitan garantizar los derechos de esta población de manera integral.
A través del taller “Ruta de atención a niñez y adolescencia no acompañada y/o separada”, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ANCUR), el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), UNICEF y el Grupo Interagencial sobre Flujos Migratorios Mixtos (GIFMM) propiciaron un diálogo constructivo con integrantes del Sistema de Justicia Familiar.
En dicho encuentro se resaltó la importancia de fortalecer y capacitar el talento humano, así como mejorar la articulación con las instituciones para garantizar derechos sin tener que hacer apertura de un Proceso Administrativo de Restablecimiento de Derechos (PARD); cómo vincular de manera ágil a un niño o niña al sistema de salud o facilitar su identificación por medio de un registro civil.
Desde el ICBF se profundizó sobre la necesidad de implementar el enfoque diferencial a la hora de atender a la niñez y adolescencia indígena migrante con el objetivo de eliminar prejuicios, estereotipos, generar acción sin daño y respetando el principio constitucional de la diversidad étnica cultural.
También se presentaron conceptos básicos de Derecho Internacional aplicado a los PARD por apátrida, con necesidades de protección internacional y otras características derivadas de la protección de los niños, niñas y adolescentes.
Este fue un escenario para que las autoridades administrativas, junto con cooperación internacional, fortalecieran mecanismo que permitan garantizar la adecuada atención con un enfoque territorial, bajo una mirada de respeto y protección de los derechos humanos.