La oficina del alto comisionado para la Paz confirmó la denuncia realizada por la Organización Nacional de los Pueblos Indígenas de la Amazonía Colombiana, OPIAC, sobre la masacre de cuatro menores de edad a manos del frente ‘Carolina Ramírez’ del EMC de las disidencias de las Farc en Putumayo.
A través de un comunicado le enviaron solidaridad a la familia de las víctimas que “se encontraban retenidos (y) fueron asesinados en Putumayo”.
“Rechazamos enfáticamente esta conducta criminal del frente ‘Carolina Ramírez’ del EMC-FARC que desconoce el DIH y constituye un atentado a la paz. De acuerdo con las convenciones y protocolos internacionales, el reclutamiento de menores es un crimen de guerra que afecta a los niños y niñas, también a sus familias y comunidades”, dice el comunicado de la Oficina del Alto Comisionado para la Paz.
También se refieren al reclutamiento de menores como un mecanismo de exterminio de los pueblos originarios por lo que son hechos “inexcusables”, que van en contra de la paz con justicia social y con la paz.
“La población colombiana no tolera más sangre derramada. La exigencia a quienes persisten en la violencia es clara: es el momento de parar el conflicto armado y de dar paso a la construcción de la paz con justicia social y ambiental”, menciona el documento.