Han pasado cuatro meses desde aquel triste 16 de marzo cuando fue asesinado vilmente el joven cantante y compositor Jaime Molina Rincón. A la fecha, las autoridades que llevan el caso no han entregado ninguna información sobre los avances de la investigación.
La recompensa de $40 millones de pesos que en su momento ofrecieron la alcaldía de Riohacha y la gobernación de La Guajira para quien diera información del homicida, no han dado resultados. Sus familiares, amigos y toda la sociedad riohachera siguen exigiendo justicia.
En ese sentido, la tarde de este lunes 15 de julio a las cuatro de la tarde, los familiares y amigos de ‘Moli’, como era conocido el cantautor y empresario protagonizarán un plantón pacífico en el muelle del distrito de Riohacha, frente a las instalaciones de la Fiscalía General de la Nación.
Jaime Molina, el amigo de todos
El silencio, la rabia, la tristeza y la impotencia arropan al distrito de Riohacha desde la tarde de este sábado 16 de marzo. A uno de sus buenos hijos se le fue arrebatada la vida de manera vil e injusta, en medio de un atraco a mano armada perpetrado casi en el centro de la ciudad y a la vista de la incompetencia de las autoridades.
Jaime Molina Rincón era un joven de 35 años de edad, profesional en Administración de Empresas de la Universidad de La Guajira; soñador, alegre y dueño de un gran talento que lo hizo merecedor del título ‘el amigo de todos’. Cantaba, componía y tenía la actitud de los grandes, siempre positivo, sonriente y dispuesto a ayudar a su familia y amigos.
Se estaba convirtiendo en un empresario exitoso. Además de cantar y componer, Jaime tenía varios negocios: en 2020 inauguró una tienda de alquiler de piscinas; en 2021 abrió el restaurante ‘Kong, cero grasas’; en 2022 montó ‘Efecto granizados’ en la calle primera; y justo el día de su muerte se encontraba adecuando un local para abrir una tienda de ropa.
Hoy, su madre Claudia Rincón Aguilar, sus hermanos Hellen, Miller, Jaime y Darío; su pequeño hijo Jimmy José, su novia Briggitte Salas, sus colaboradores y toda la sociedad riohachera llora la partida repentina de un buen hijo, nieto, hermano, papá, novio, amigo y artista, que no merecía partir de este mundo “De Repente”, como decía su canción.