De la mano con las comunidades y autoridades ambientales, Hocol avanza en acciones orientadas a la protección del manatí, una especie vital para la biodiversidad de Colombia. La empresa desarrolla actividades con habitantes y entidades del orden regional en diferentes zonas del Caribe colombiano para empoderarlos en el cuidado y la conservación de esta especie.
Desde el 2017 Hocol apoya actividades de protección de los manatíes, que no solo se centran en el componente biológico de la especie y sus liberaciones sino también en el social, mediante talleres, capacitaciones, monitoreos, trabajo con comunidades y actividades académicas.
El impacto de estas acciones se refleja en la conservación de los hábitats y la especie, así como en la sensibilización de la comunidad y la obtención de información valiosa para ñ fortalecer la investigación y desarrollar estrategias a nivel nacional para la protección del manatí. Hocol ha trabajado coordinadamente con las autoridades ambientales regionales, incluyendo la Corporación Autónoma Regional de los Valles del Sinú y del San Jorge (CVS), CARDIQUE y la Corporación Autónoma Regional del Sur de Bolívar, así como la Fundación Omacha, contribuyendo a que a la fecha once manatíes hayan regresado a su hábitat.
Estas acciones reflejan el compromiso de Hocol de continuar siendo partícipes del desarrollo social del territorio, proteger la riqueza natural, trabajar por operaciones sostenibles y hacer de la gestión del territorio un asunto de todos. En el marco de la Semana de la Sostenibilidad de Hocol, que se celebra hasta este viernes 31 de mayo, se refuerza la promoción de prácticas sostenibles e iniciativas ambientales que Hocol implementa en diferentes regiones del país.
Otra de las iniciativas destacadas es la siembra simbólica de 100 árboles nativos, de un total de 5.000, en la Reserva Forestal Montes de Oca en Maicao. Esta acción se realiza en coordinación con la Corporación Autónoma Regional de La Guajira (Corpoguajira) y la alcaldía de Maicao, con el objetivo de recuperar este ecosistema forestal que sirve como fuente hídrica para el acueducto del municipio.
Además, se introdujeron al mar 12 tortugas marinas de la especie caguama (Caretta caretta), las cuales han sido sometidas a procesos de cría y cuidado desde neonatos para que alcancen el tamaño adecuado y puedan integrarse a las poblaciones naturales.
Estos ejemplares forman parte del programa de conservación que Hocol apoya en colaboración con la Fundación Sila Kangama. Las tortugas marinas son bioindicadores de la calidad de los océanos, y su recuperación e incremento benefician también a los ecosistemas que visitan, como las praderas de pastos marinos y los fondos blandos, los cuales están relacionados con su ciclo de vida.