La tranquilidad de la madrugada sobre la Troncal del Caribe fue interrumpida por una violenta explosión que no solo destruyó por completo el peaje Alto Pino, sino que también apagó para siempre la vida de dos trabajadores: Kerry Mercado Araujo y Liceth Orozco. Ambos se encontraban cumpliendo con su turno nocturno cuando fueron sorprendidos por el atentado terrorista que sacudió el departamento de La Guajira.
Kerry, conocido por sus compañeros como “el señor Jerry”, era conductor de grúa y trabajaba con responsabilidad y dedicación en la concesión Santa Marta – Paraguachón. Liceth, por su parte, era la cajera del peaje, una mujer descrita como amable y comprometida con su labor. Ambos eran oriundos de Maicao y sostenían a sus familias con el fruto de su trabajo.
Según versiones preliminares, ninguno de los dos logró salir a tiempo cuando hombres armados irrumpieron en el sitio y activaron explosivos hacia las 12:20 a.m. La onda explosiva, que se sintió a varios kilómetros, provocó su muerte instantánea y dejó destrucción total en las instalaciones del peaje.
Mientras las autoridades investigan los móviles del atentado —al parecer perpetrado por el ELN, según indicios hallados en la zona—, las familias de Kerry y Liceth enfrentan el dolor de sus muertes repentina y cruel. Cabe recordar que este peaje vial se encuentra ubicado en el kilómetro 41 de la vía Riohacha – Maicao, en medio de varias comunidades wayúu.