La Alcaldía de Riohacha adelanta acciones para mitigar el riesgo y las afectaciones derivadas de las lluvias que se han presentado en los últimos días, producto de la ola invernal que azota al país. La coordinadora distrital de UNGRD, Shirly Iguarán, anunció que “Sigue lloviendo en la zona rural y es muy preocupante la situación de nuestros campesinos. Tenemos unas crecientes súbitas en todo lo que es el río Ranchería, río Tapias, y esto ocasiona una alerta roja”.
A nivel nacional, el Director de la Unidad Nacional de Gestión de Riesgo y Prevención del Desastre está comprometido con el Distrito, pues anunció el despliegue de sus equipos con la operación de maquinarias amarillas, entrega de ayudas humanitarias y la disposición del Ejército Nacional. Este viernes 3 de noviembre se realizará un recorrido con ingenieros de la UNGRD para focalizar, caracterizar y priorizar los puntos de alerta y censar las afectaciones que presentan más de 10 mil habitantes de la ciudad capital.
“La declaratoria de desastre de carácter nacional, firmada por el señor presidente de la república se extiende por un año más, hasta el 30 de octubre del año 2024. Esto nos permite las intervenciones y quiero dejar en el camino la resolución 0987, que repito, por situaciones de desastre y por prevención de la vida, hasta se habilita, inclusive las peticiones de los movimientos sociales, populares y comunitarios”, expresó el Director Nacional de UNGRD, Olmedo López.
El director también hace claridad sobre la no necesidad de permisos de orden nacional que tienen que ver con intervenciones específicamente de causes o de vías, teniendo en cuenta que estas acciones se hacen para salvar vidas. Actualmente, se presentan afectaciones en 40 barrios de la ciudad, en todas las poblaciones asentadas y en la comunidad de Cucurumana, provocando grandes pérdidas en cultivos y daños en viviendas en la zona rural, especialmente en el corredor agrícola.
Hoy la prevención que emite la administración distrital va orientada a no seguir arrojando escombros, basura a las calles cuando esté lloviendo, resguardarse en una zona segura, no construir obstruyendo canales ni espejos de agua; teniendo en cuenta que lo anterior le quita espacio e invade la zona de la Laguna Salada, que es la mayor zona de amortiguamiento de las aguas pluviales del Distrito.